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Calles en mal estado dañan el transporte público en zonas de Puerto Vallarta
Las condiciones precarias de algunas calles en las zonas rurales de Puerto Vallarta, específicamente en áreas como la parte alta de El Pitillal, zonas de Ixtapa o en la parte alta de las colonias Independencia, Playa Grande o Ramblases, por mencionar algunas, continúan siendo motivo de preocupación para los residentes locales y los conductores del transporte público que operan en la región.
La falta de mantenimiento adecuado y la ausencia de inversiones significativas en infraestructura vial han dejado a estas comunidades en un estado de abandono, con calles llenas de baches, grietas y desgaste extremo, tal y como lo observó Urrutia Comunica en recorridos hechos durante 10 días.
Esta situación no solo representa un peligro para los vehículos que transitan por ellas, sino que también impacta negativamente en la eficiencia y seguridad del transporte público que sirve a estas áreas, en calles como Juan de la Barrera, Ecuador, Independencia, Centro de Salud, entre otras.
Los conductores de autobuses y taxis que operan en estas zonas rurales han expresado su frustración ante las dificultades que enfrentan a diario.
“Es una odisea manejar por estas calles. Los baches son tan grandes que a veces pareciera que podrían tragarse nuestros vehículos”, comentó Juan López, conductor de un autobús que realiza rutas en la parte alta de El Pitillal.
Los pasajeros tampoco están exentos de los efectos negativos de esta problemática. Los constantes sacudones y movimientos bruscos provocados por el estado de las calles no solo hacen que el viaje sea incómodo, sino que también pueden generar accidentes y lesiones entre los usuarios del transporte público.
Además del impacto en la seguridad y comodidad de los residentes y visitantes, el mal estado de las calles también tiene repercusiones económicas.
Los costos de mantenimiento y reparación de los vehículos se incrementan considerablemente debido al desgaste causado por las condiciones del pavimento, lo que afecta especialmente a aquellos que dependen del transporte público para sus desplazamientos diarios.
Ante esta situación, los residentes y empresarios del ramo del transporte público y privado, han instado a las autoridades locales a tomar medidas urgentes para abordar el problema.
Se espera que el gobierno municipal de Puerto Vallarta, que preside Luis Michel, tome cartas en el asunto y destine recursos significativos para la rehabilitación y mejora de las calles en las zonas rurales afectadas, con el fin de garantizar la seguridad y bienestar de todos los ciudadanos.
Mientras tanto, los conductores del transporte público y los habitantes de estas comunidades rurales continúan enfrentándose a un desafío diario en forma de calles deterioradas, en espera de una solución que brinde alivio a esta problemática arraigada en su día a día.