Alerta ONU por incremento de fentanilo y metanfetaminas en el país

-El reporte de la organización indica que México, aunque sigue sin sufrir la masividad y alcance de Estados Unidos, sufre un aumento significativo para el país en el consumo de metanfetamina y de fentanilo.

México no solamente es uno de los principales productores de drogas del mundo, sino que ahora también sufre en los últimos años por un aumento significativo de casos de adicciones a dos sustancias: metanfetamina y fentanilo, reveló esta semana el informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDC).

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“En México, el fentanilo provocó un aumento significativo en el número de casos de personas en tratamiento y atención por trastornos por consumo de drogas entre 2018 y 2023. (…) En los últimos diez años, el número de personas en tratamiento por trastornos por consumo de metanfetamina ha aumentado considerablemente en América del Norte, más recientemente en México”, subrayó el documento entre sus principales hallazgos.

Y es que la fabricación a gran escala de metanfetamina, añadió, sigue concentrándose en centros subregionales clave, como México en América del Norte y Myanmar en Asia Oriental y Sudoriental, así como Afganistán y la región vecina en Asia Sudoccidental, y Chequia y Países Bajos (Reino de) en Europa Occidental y Central.

La metanfetamina, altamente adictiva, es un estimulante del sistema nervioso que pertenece a los llamados estimulantes de tipo anfetamínico, con efectos simpatomiméticos, con influencia en los neurotransmisores. Estas drogas se venden en forma de pastillas, polvo o cristales, por ello reciben ese sobrenombre.

También sintético es el fentanilo, un potente opioide que, igual que la metanfetamina, es altamente adictiva y en altas dosis puede provocar una sobredosis. Es 100 veces más potente que la morfina y 50 veces más que la heroína.

Un problema regional
De acuerdo con el informe de la UNODC, el consumo de opioides en América del Norte sigue siendo alto, con un 2.5 por ciento de la población adulta que declara haber consumido el año anterior (8 millones de consumidores) en 2023, con la abrumadora carga del consumo en Estados Unidos.

América del Sur, América Central y el Caribe son las subregiones con la mayor proporción de personas en tratamiento por consumo de drogas debido al consumo de productos de cocaína en todo el mundo, y son las subregiones con la mayor variedad de productos de cocaína disponibles en el mercado.

El consumo no médico de estimulantes farmacéuticos es mayor en las Américas que en otras regiones, concluye la ONU. Más mujeres que hombres abusan de estimulantes farmacéuticos y ha habido un aumento significativo en el número de personas en tratamiento por trastorno por consumo de metanfetamina en América del Norte durante la última década, más recientemente en México.

La prevalencia de personas que se inyectan drogas en América del Norte es alta, con un 1 por ciento de la población adulta (3.5 millones de personas) que se inyectaba drogas en 2023; sin embargo, la prevalencia estimada del VIH entre las personas que se inyectan drogas (casi el 7 por ciento) está muy por debajo del promedio mundial.

La metanfetamina pega fuerte
En el segundo semestre de 2023, año del reporte de la UNODC, se presentaron 9 mil 584 personas con consumo de drogas ilícitas a solicitar tratamiento por primera vez a Centros de Integración Juvenil (CIJ) en México, de acuerdo con cifras oficiales. Las drogas de mayor impacto, por las que se solicitó el tratamiento fueron: metanfetaminas (34 por ciento, esencialmente cristal: 33.6 por ciento), detalló la dependencia.

“Entre las principales sustancias consumidas alguna vez fueron, están el alcohol (82.1 por ciento), cannabis (79.4 por ciento), tabaco (72.1 por ciento), y después de estas drogas más comunes ya se encuentra la metanfetamina, con casi la mitad de los declarantes: el 45.8 por ciento; mientras que en el mes previo al ingreso a tratamiento se consumió esta última droga principalmente entre un 24.1 por ciento de personas.

Un detalle es que, incluso en el consumo, hay una divergencia entre hombres y mujeres. “Ellos acuden en mayor proporción que las mujeres por problemas asociados al consumo de cannabis, inhalables, cocaína, crack y heroína. Ellas por lo que les ocasiona el uso de metanfetaminas, alcohol, tabaco y benzodiacepinas”, indican los CIJ.

Pero, en general, las sustancias más consumidas por hombres y mujeres fueron el alcohol, el cannabis, el tabaco y las metanfetaminas. La edad de inicio de consumo de metanfetaminas es un promedio de 20.4 años, con las mujeres empezando antes: un promedio de 18.8 años para el primer consumo, por 20.9 años para los hombres, también en promedio.

Fentanilo: agresivo, pero minoritario
La Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones (Conasama) de la Secretaría de Salud de México presentó en abril de 2024 un Informe de la demanda y oferta de fentanilo en México, donde destacó que en 2023 –mismo año del reporte de la ONU– se registraron 430 casos de atención por consumo de fentanilo, mientras que en 2022 fueron 333, los cuales se concentran en estados del norte del país como Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Sinaloa y Sonora.

“Esto muestra que el incremento es a nivel local, no nacional; sin embargo, la principal preocupación gira en torno a su alta letalidad”, concluyó en aquel momento la dependencia.

Es decir, en ambos casos, se trata de aumentos significativos, pero todavía lejos de la masividad y alcances que tiene en Estados Unidos, sobre todo el fentanilo, que, incluso con las reducciones de los últimos años, para 2023 mataba aún más de 100 mil personas al año en aquel país.

El problema global de las drogas
En 2023, cerca de 316 millones de personas consumieron alguna droga (sin contar el alcohol y el tabaco), es decir 6% de la población entre 15 y 65 años, un aumento, aunque ligero, frente al 5.2 por ciento de la población en 2013.

Con 244 millones de usuarios, el cannabis continúa siendo la droga más utilizada, seguido de los opioides (61 millones), las anfetaminas (30.7 millones), la cocaína (25 millones) y el éxtasis (21 millones). Pero, el informe advierte de una posible cifra negra, entre “los nuevos grupos de personas en situación de vulnerabilidad que huyen de la inestabilidad y el conflicto”, que podrían hacer que estas cifras incrementen.

En general, la UNODC advierte el caso de la cocaína, cuya producción, incautaciones y consumo alcanzaron nuevos máximos en 2023, convirtiéndose en la droga ilícita con mayor crecimiento de mercado. “La producción ilegal se disparó a 3 mil 708 toneladas, casi 34 por ciento más que en 2022. Las incautaciones mundiales alcanzaron un récord de 2 mil 275, lo que supone un aumento de 68 por ciento con respecto a 2019-2023. El consumo creció de 17 millones de usuarios en 2013 a 25 millones en 20232, detalló.

Por último, advirtió del “costo social” por no abordar los trastornos vinculados con el uso de drogas, ya que estas afectaciones provocaron casi medio millón de muertes y 28 millones de años de vida saludable se perdieron por discapacidad y muertes prematuras en 2021.

“Se calcula que sólo una de cada 12 personas con trastornos por consumo de drogas recibió algún tipo de tratamiento en 2023. Factores como las políticas públicas contextualizadas y la disponibilidad de servicios de salud y sociales basados en la evidencia pueden ayudar a mitigar el impacto del consumo de drogas en las personas y las comunidades”, finalizó.

Fuente: Sin Embargo