Una amplia movilización de taxistas, restauranteros, vendedores de artesanías y representantes del sector naviero se llevó a cabo este martes para manifestarse contra el nuevo impuesto propuesto por la Cámara de Diputados, que pretende cobrar más de 800 pesos por crucerista a partir de 2025.

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Los inconformes advierten que esta medida afectaría gravemente la economía de destinos turísticos como Puerto Vallarta, donde el arribo de cruceros es clave para miles de empleos y negocios locales.

Una amenaza directa al turismo

El Florida-Caribbean Cruise Association (FCCA), organismo que representa a las principales navieras que operan en el Caribe y América, advirtió que de aprobarse este impuesto, México quedaría fuera de sus itinerarios. Esto implicaría la cancelación de más de 140 arribos programados para Puerto Vallarta en 2025, dejando a la ciudad sin los ingresos millonarios que generan estos turistas.

Carlos Gerard, empresario y defensor del sector naviero, ejemplificó el impacto económico.

“Carnival Cruise Line, que actualmente paga 38 millones de pesos al año por sus arribos a Puerto Vallarta, enfrentaría un cobro adicional de 3.2 millones de pesos por cada crucero, considerando los 4,000 pasajeros que transportan en promedio. Esto es insostenible para las empresas y los destinos que dependen de ellas”, señaló

Demandan, diálogo y análisis

Los manifestantes denunciaron que la propuesta fue diseñada sin consultar a los actores clave del sector turístico y naviero. Por ello, pidieron a la Cámara de Senadores que abra mesas de diálogo y negociación para evitar que esta medida se implemente.

“No estamos en contra de los impuestos, pero exigimos que sean justos y que no ahuyenten a los cruceros, que son una fuente esencial de ingresos para nuestras comunidades”, indicó un representante de los restauranteros.

Impacto en la economía local

Los sectores afectados recordaron que los cruceristas generan una derrama económica significativa en destinos como Puerto Vallarta, donde miles de familias dependen de los servicios turísticos y las ventas que se realizan durante las escalas. Además, advirtieron que la cancelación de arribos afectaría la imagen de México como destino competitivo en el mercado internacional.

Expectativa ante el debate legislativo

La propuesta de ley aún debe ser discutida en la Cámara de Senadores, lo que mantiene al sector turístico en espera de una resolución favorable. Mientras tanto, los manifestantes anunciaron que continuarán con sus acciones hasta garantizar que sus demandas sean escuchadas.

“No podemos permitir que esta decisión se tome a espaldas de quienes vivimos del turismo, y pedimos que se abra una mesa de diálogo para analizar los pros y contras de esta nueva medida”, concluyó un líder del gremio de taxistas.

Con más de 140 arribos en riesgo y un panorama incierto, Puerto Vallarta se encuentra en una encrucijada que podría redefinir su futuro como uno de los principales destinos de cruceros del Pacífico mexicano.